16.12.06

paraluis



Por dónde deambula tu cuerpo
cuando no estás adentro mío,
qué persigue el anhelo de mis manos que te escarban
que obedecen tu recuerdo y me acarician,
a dónde conduce mi humedad de cántaros
cuando no estás adentro de mí.

Absurdo.
Piel de amparo entre mis noches,
entre mis sábanas,
entre mi penetrarte con tus dedos en los míos,
entre mi placer que me has ansiado entre tu ausencia.

Tus labios no descansan,
absorben el camino entre mis piernas
a donde te conduzco empapada
cada vez que tu cuerpo decide
no estar adentro de mí.

Pídele perdón por esta tonta obstinación de mi deseo.